Estos días he leído críticas a la participación en las movilizaciones habidas en Cataluña tras la sentencia del Tribunal Supremo, que se resumen en que quien participe en esas manifestaciones, apoya al nacionalismo burgués. Yo quisiera ampliar mi opinión de por qué es positivo que los anarquistas participen/mos en esas movidas.
Que un o una anarquista desacomplejada se implique en una manifestación masiva, que va a colapsar centros neurálgicos de la ciudad como aeropuertos, carreteras o centros públicos, va a venirle pero que muy bien. Porque si no tiene ni puta idea de cómo va eso, adquiere experiencia. Comprueba cómo la violencia siempre la provoca y ejecuta el Estado. Ve a provocadores e infiltrados intentando liarla en horario de máxima audiencia. Conoce a los participantes en sus diversas facciones: los de los partidos de la Paz, los del Orden, los sin partido, los despistados… Y cuando aumenta la represión, y la policía empieza a dar candela, notará cómo entre toda esa masa, muchos jóvenes rompen filas, desobedecen las consignas, y hacen frente. Joder, que una rata planta cara cuando la acorralan. Y ahí desaparecen las banderas, las ideologías y los intereses políticos. Ese grupo va a protagonizar su papel en la tragedia. Y si eres un anarquista, sabrás en ese momento cuál es tu bando.
Si participas en varios movimientos de ese tipo, una vez que vayas haciendo cuerpo a la batalla, sabrás como neutralizar al infiltrado, cómo proteger a los manifestantes indefensos obstaculizando a los represores, de qué forma contrarrestar a los políticos, cómo hablar a la multitud y hacer notar tus ideas libertarias, sin que te consideren un gilipollas… De lo contrario, el día que te pille una asamblea y aparezca la tele o el diputado con el megáfono…, o la semana que te veas en una insurrección en condiciones, vas a estar tan indefenso como un pollito en medio de un tornado.
Participar en una movida en la que puedas influir con tu presencia, es la base de la Propaganda por el Hecho. Haz sentir tu Fuerza, y te respetarán. Critica a diestro y siniestro, y serás un cascarrabias.
En la actualidad, con unos anarquistas tan dispersos, no podemos ir en el mejor de los casos más allá de currarnos el terreno. Pero ¡qué grandes avances lograríamos si pudiésemos tener núcleos de anarquistas con la cabeza bien amueblada! Sería muchísimo más sencillo programar acciones nuestras en las que participen otros/as en medio de la vorágine (1).
Lo interesante sería dar el salto de ser un movimiento social en el que cada cual va a su bola, y cada uno en su momento es criticado por compañeros, a un movimiento en el que nos reconocemos unos a otros como anarquistas: partidarios de la no dominación, que ni mandan ni obedecen. Solidarios, combativos, inteligentes, fuertes.
Y ahora, bajo estas premisas que he expuesto, me pregunto si alguien puede pensar que yo, o algún otro, u otra, apoyamos al nacionalismo o a la derecha. Seguramente sí. Lo que pasa es que, realmente, la opinión de quien piense así, muy respetable, eso es, a mí no me afecta.
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(1) La ocupación de centros estratégicos, centros de trabajo, espacios públicos, ha sido una constante en el movimiento libertario. O trabajar por la amnistía de los 200 detenidos estos días, muy jóvenes en su mayoría. Por ejemplo, que puede haber cosas más interesantes que se me hayan pasado por alto.
