¿Os acordáis del 15 M y de la que fue llamada Spanish Revolution? ¿Lo llaman democracia y no lo es? A mí me parece que el producto más destacado de su andadura, fue la creación de la Ley Mordaza, promovida por CiU, elaborada y votada por el PP entonces en el Gobierno con mayoría absoluta, y aplicada actualmente por el bipartito de progreso, apoyado por el resto de partidos. Fue una ley hecha por políticos, para defenderse de la gente que les estaba llenando de gargajos. Y no les debe parecer tan mala esa Ley, cuando la aplican a discreción sus cuerpos de seguridad en el Estado de Alarma. Distinguidos letrados consideran que una parte de la misma es inconstitucional, pero que hay que aplicarla. Muy curioso. Esa es la normalidad.
Sabréis seguramente también, que hay una cantidad de gente, pobre de consideración, que están con el agua al cuello por el confinamiento. La gente que vive en el margen, sin contratos y sin cotizar, y que vende, cuida, limpia, instala, arregla, recoge, planta, fumiga, sirve, descarga, carga, pica, mezcla, suelda, mendiga, fornica, etc., se ha visto de golpe y porrazo, sin ingresos, comiendo macarrones día tras día, saltándose la cena o el desayuno, y pasándolas canutas. A ellos y a ellas no les ha llegado ni la renta vital, ni la mínima, ni nada en general, porque no existen. Muchos/as mueren y no entran en la estadística guerrera. Las medidas estructurales contra la precariedad y la pobreza, se dejan –posiblemente– para el siglo que viene. También esto y mucho más que nos viene del Poder, es la normalidad.
No nos vamos a quejar de que el Poder sea cruel e insensible. Sería como lamentar que el fuego queme. Es natural. Si ves a un tigre lleno de babas acercarse, lo normal no es lamentarse. Lo suyo es meterte en una alcantarilla, o subirte a una farola mientras llegan los del circo. Y por eso quería destacar la aportación de los solidarios a esta movida.
Entre las miles de actividades interesantes que han apoyado los y las anarquistas, libertarios y desinteresados/as en general: la Huelga de Alquileres. Seguir pagando no es aceptable, cuando no se tiene ni para comer. Podéis leer la valoración hasta ahora de la misma en: http://alasbarricadas.org/noticias/node/43683. También la actividad de redes vecinales, solidarias, grupos de apoyo mutuo o como se quiera llamar a los enjambres de mujeres y algunos hombres. Cada vez que transportan alimentos para familias, cada vez que acompañan a un anciano solitario, cada vez que organizan una colecta, se la juegan saltándose el Estado de Alarma. Y comer, hay que comer todos los días.
Además, en http://alasbarricadas.org/noticias/node/43346 podéis encontrar en qué puntos están incidiendo más los compañeros y compañeras a través del Apoyo Mutuo: una actividad que se da entre iguales, en la que los bienes, regalos y servicios no se comercializan ni se venden, ni se calcula el beneficio, ni el coste, ni se calcula cuánto o cuándo te devolverán o tendrás que devolver el apoyo. Este tipo de economía es inmediata, carece de burocracia, actúa sobre el terreno, funciona al margen del capitalismo, no acumula posesiones, y es realmente un tipo de economía anarquista, funcionando en el aquí y el ahora. Por eso cuando alguien diga que el anarquismo es utópico o que no puede funcionar en esta sociedad masificada, se le puede responder tranquilamente que nuestra economía es real, es abundante, desinteresada, equitativa, limpia. Y es nuestra propuesta para salir de una normalidad delirante en perpetua crisis, y entrar en una posnormalidad que sea, por favor, un poco más relajada.
