Archivo de la etiqueta: Movimientos sociales

Brasil: del levantamiento de junio a la reacción autoritaria

A finales de julio de 2014, poco después del fin de la Copa del Mundo, celebrada ese año en Brasil y marcada por numerosas protestas populares, una noticia acaparó los titulares de los más diversos medios de comunicación del país: Mijaíl Bakunin, un anarquista ruso fallecido en 1876, fue mencionado en una investigación policial en Río de Janeiro como uno de los posibles sospechosos de los disturbios violentos ocurridos durante la Copa.

Seguir leyendo Brasil: del levantamiento de junio a la reacción autoritaria

Reflexiones sobre las propuestas anarquistas (o libertarias o autogestionarias o como queramos llamarlas)

Lanzo algunas reflexiones sobre las propuestas anarquistas en el siglo XXI, tratando de huir de tópicos y distorsiones, y recordando la visión libertaria sobre una autogestión social en la que, como no podría ser de otra manera, la solidaridad es un valor innegociable. Nunca esta de más, visto lo visto, aclarar muchísimas cosas acerca del anarquismo, por supuesto sin que mis palabras se tomen de modo definitivo (simples reflexiones basadas en un conocimiento, por supuesto limitado, pero siempre realizadas ante un horizonte libertario). Hay que aceptar que, si somos estrictos con la etimología de la palabra anarquismo («ausencia de principio»), el tema parece invitar de entrada a la polémica. Como es lógico, el anarquismo no niega en ningún caso el poder, sino la concentración del mismo; ni siquiera puede decirse que se esté en contra del poder político, sino del Estado, es decir, de aquella concentración de poder que supone una división tajante entre el que manda y el que obedece. Lo mismo ocurre con la idea de autoridad, que no es negada por el anarquismo, ya que reconoce una autoridad natural basada en el saber y en la capacidad de los individuos.

Seguir leyendo Reflexiones sobre las propuestas anarquistas (o libertarias o autogestionarias o como queramos llamarlas)

La tierra que se subleva de broma

Revuelta espectáculo en Cataluña

La teatralización de la protesta y su consiguiente trivialización es la característica más común de las movidas en la sociedad del espectáculo, aquella en la que todas las experiencias vividas se desvanecen en una representación. Donde el activismo se funde con el entretenimiento y el espectador ejerce de figurante. El hecho de que “la gente” de nuestra época prefiera la imagen a la cosa, la ilusión a la verdad y el sucedáneo a la autenticidad -o sea, el espectáculo- se debe a que esa “gente” es otra, radicalmente opuesta a la que contaba en la época precedente. Tengamos presente que la pérdida de centralidad del proletariado industrial en las luchas sociales fue seguida -en los países donde reinan las condiciones posmodernas de producción capitalista- por un proceso de desclasamiento que desembocó en el desarrollo de algo que llaman “ciudadanía” y que nosotros podríamos denominar clases medias asalariadas. Dichas clases, sentadas entre dos sillas, la burguesa y la popular, pueden llegar a sentirse e incluso declararse antagónicas con la clase dominante, pero nunca manifiestan en la práctica tal antagonismo. El común denominador de las demostraciones mesocráticas como las anti-globalización, contra la guerra, el 15-M o las Marchas de la Dignidad, ha sido siempre la voluntad de no alterar el orden ni subvertir las reglas de juego del poder. En realidad, la revuelta fake de los estratos sociales intermedios que pasan de pelear, no obedece a una toma de conciencia antitética, esto es, a una nueva conciencia de clase antisistema, sino que se somete al  principio hegemónico regulador de la vida en la sociedad de consumo: la moda. Eso explica no solo el aspecto frívolo y el poder de atracción del movimentismo ciudadanista, sino su carácter efímero, seudolúdico y ostensiblemente efectista. Lo peor es que las redes sociales han reforzado los cimientos de la irrealidad, dando un golpe de muerte a lo que quedaba de comunicación autónoma y sentido comunitario en la sociedad civil. Al desplazarse la mayor parte de la contestación hacia el espacio virtual, donde las imágenes y los cuentos valen más que las palabras, el espectáculo de la revuelta-red puede sustituir cómodamente a las prosaicas luchas reales.

Seguir leyendo La tierra que se subleva de broma

Cómo dejar de ser víctimas de la espera. Acerca de Las sublevaciones de la tierra

El gesto radical, situado y multiplicado, se transforma en acción directa y de masas. Se trata de “Golpear fuerte y dónde haga daño”, aseguran en su manifiesto.

Estamos a la espera. Día y noche. Los acontecimientos se suceden unos a otros, y los deglutimos sin apenas protestar. Pandemia del covid, guerra de Ucrania, genocidio de Palestina, catástrofes naturales que asolan la Tierra… Tragamos todo lo que nos echen, incapaces de vomitar, encadenados a una impotencia de la que no conseguimos deshacernos. Lo posible distrae durante unos instantes y, finalmente, siempre ahoga. Lo imposible no es más que esta realidad despótica que, poco a poco, se ha impuesto. Estamos a la espera. Depositamos una esperanza absurda en un colapso final. Nos hundimos en una noche teñida de melancolía. El mundo se ha cerrado sobre sí mismo, y los inquilinos de la casa nos conocemos muy bien. Los fantoches neofascistas han cerrado la puerta de salida, mientras se apresuran a dividir la tierra en zonas de influencia.

Seguir leyendo Cómo dejar de ser víctimas de la espera. Acerca de Las sublevaciones de la tierra

Howard Zinn: «el problema es la obediencia civil»

Howard Zinn, fallecido en 2010 a los 87 años, fue un historiador social y un radical próximo al anarquismo. Una de sus grandes obras fue A People’s History of the United States (edición en castellano con el título La otra historia de los Estados Unidos). Fue, además, autor de infinidad de conferencias y artículos, así como un dramaturgo con obras como Marx en el Soho (reciente versión en Madrid con el título de Marx en Lavapiés) o Emma, que recoge hechos de la vida real de Emma Goldman.

Seguir leyendo Howard Zinn: «el problema es la obediencia civil»

Descomposición absoluta a niveles altos

El desastre causado por las inundaciones provocadas por la “gota fría” del 29 de octubre pasado, especialmente en la parte sur del Área Metropolitana Valenciana, no tiene nada de natural. En la génesis y desarrollo de la mayor catástrofe habida en la zona han confluido cuatro causas antinaturales muy imbricadas en los modos de habitar, trabajar y administrar la cosa pública bajo un régimen capitalista. La primera, de origen industrial, es el calentamiento global generado por la emisión de gases de efecto invernadero de las fábricas, calefacciones y vehículos, causante de fenómenos meteorológicos extremos como la d.a.n.a. La segunda, de carácter político, es la incompetencia culpable de la administración estatal y autonómica, cuya irresponsable pasividad y negligencia podría tacharse de homicida. La tercera, de características económicas y sociales, es la suburbanización completa de la periferia agraria de la ciudad de Valencia, o sea, la conversión de los municipios de la Huerta en un gran suburbio-dormitorio y en una zona poligonera logística, comercial e industrial. La cuarta, consecuencia de la anterior, es la motorización generalizada de la población suburbial, forzada por la tajante separación que el desarrollismo ha implantado entre los lugares de trabajo y de residencia.

Seguir leyendo Descomposición absoluta a niveles altos

Precauciones a tener en cuenta, en esto de los desastres y catástrofes

Tó controlao. Nervioh d’asero.

¿Qué es lo que pasa cuando un Gobierno Popular llega al poder? Pues que lo que quiere es que le hagan palmas sus seguidores. Con el trabajo que cuesta llegar a mandar… ¿En qué se transforma esa peña? En una camarilla que intentan influir en los «asuntos de Estado» ¿Y en qué se convierten los que están todo el día criticando lo que hace el Gobierno? Pues en una pandilla que se asocia con fines delictivos y/o embaucadores. Así que te lees la prensa, y compruebas que el 95% de los titulares en nada interesan a los mortales comunes, que queremos agua caliente, papel higiénico y dentista (que son las mis cosas mejores de la vida). A ver, ¿A mí qué me importa que Bolsonaro conspirase para asesinar a Lula? Es como pretender que el Conde Drácula no beba sangre humana. En fin. Así es la aristocracia.

Os comento una noticia que sí es curiosa. En los países del Norte de Europa, los gobiernos están repartiendo a la población folletos en los que se les dan instrucciones para comportarse debidamente en caso de guerra o catástrofe (1).

Medidas si no tienes pelas: ¡Corre!

Las guías finlandesa y noruega van en el mismo sentido. Y otros países fronterizos con la Federación Rusa actualizan su cartilla de cara a que la población sepa enfrentarse a situaciones como que haya una epidemia, que no te paguen (horreur), que se vaya la luz, ataques terroristas, guerra nuclear y guerra convencional, cortes de agua, envenenamiento de acuíferos, inundaciones, caída de internet, noticias falsas, ¡caídas de internet!… En la red podéis escuchar los diversos tonos de las alarmas de sirena uaaaaauuuuu y su significado. Se realizan simulacros para que la población se acostumbre y salga de najas en caso de que vaya a caer un misil intercontinental con varias bombas atómicas. Cosas así. Cada barrio tiene una especie de «punto seguro», y si no existe te explican cómo cavar un agujero, meterte bajo un puente o en el garaje de la urbanización. El sonido de las trompetas, es acojonante. Se acabó el estreñimiento. Así se debió de sentir Ulises atado al mástil.

No preocupe, que no paja ná

Se recomienda además que acumules agua y comida pa aguantar al menos una semana. O sea, que a comprar latas de fabada y a guardarlas en el cuarto la agüela. No explican dónde hacer la caca. En fin, una delicia.

Estamos en un bosque… ¿Qué? Ni puta idea. 

Aquí en el sur no tenemos ese problema, es decir que si hay guerra o nos bombardean, ni nos enteraremos. Todos muertos y se acabó. Luego tanto gobierno como oposición, y sus respectivas camarillas y pandillas, se dedicarán a tirarse los trastos unos a otros eludiendo responsabilidades, y despotricando que la culpa la tienen los otros. Y por supuesto, la izquierda dirá que la culpa de la tiene el comodín de los EEUU. Lo que pasa es que como Trump dice que va a acabar con la guerra y va a enflaquecer la OTAN…, les va a quitar discurso a los rojillos, que están cada día más perturbaos, como que no saben pa dónde tirar, que tienen una idea y resulta que se la ha quitado hace un par de meses un nazi.

Que no noh farte de ná

¿Que qué podemos hacer? Amigos y amigas, la salida a todo este cacao, es el anarquismo. ¡Claro que sí! El anarquismo es organizarnos al margen de esta pandilla de desnortaos y pandilleros, es meter la cuña en las luchas sociales, por la vivienda, contra la guerra, contra la pobreza, contra la dominación, incrementando la resistencia a todo poder y autoridad.

Acratosaurio rex
https://www.alasbarricadas.org/noticias/node/56002


————————
NOTA
(1) «En los últimos años, la situación mundial ha empeorado drásticamente. En nuestro entorno se están librando guerras y los fenómenos meteorológicos extremos son cada vez más habituales. Se están utilizando amenazas terroristas, ciberataques y campañas de desinformación para debilitarnos e influirnos. Suecia se ha unido incluso a la alianza de defensa OTAN… Para resistir estas amenazas, debemos permanecer unidos y asumir la responsabilidad de nuestro país. Si nos atacan, todos debemos ayudar a defender la independencia de Suecia y nuestra democracia. Construimos resiliencia todos los días, juntos. Usted forma parte de la preparación general de Suecia para emergencias».
https://www.msb.se/en/advice-for-individuals/the-brochure-in-case-of-crisis-or-war/download-and-order-the-brochure-in-case-of-crisis-or-war/
Todas las imágenes son cortesía del gobierno sueco. De su folleto en inglés pa residentes.

Sobre una forma de contrarrevolución que está en marcha

Quienes nos proclamamos revolucionarios deberíamos saber que, si tomar nuestros deseos por realidades es engañoso para nosotros mismos, aún resulta más perjudicial cuando intentamos propagar social y políticamente ese autoengaño revistiéndolo con el ropaje de lo factual.

Sin duda, debemos celebrar como una importante muestra de rebeldía y de dignidad popular el hecho de que el pasado 27 de septiembre decenas de miles de personas se movilizaran en todo el país para protestar con rabia por el genocidio que Israel está cometiendo en Gaza. Como suele ser habitual estos últimos años, buena parte de las manifestaciones estaban compuestas por un gran proporción de personas jóvenes, muchas de ellas mujeres.

Seguir leyendo Sobre una forma de contrarrevolución que está en marcha

La fragilidad de la apuesta cínica

El cinismo ha formado parte siempre de la política institucional de derechas y de izquierdas, porque es una herramienta necesaria para la gestión estatal. El cinismo también es imprescindible para lubricar las relaciones sociales en el Capitalismo. Entonces ¿qué implica su presencia cada vez mayor en los movimientos y luchas que se dicen anticapitalistas? ¿qué efectos tiene? Y, sobre todo, ¿cómo se podría superar la lógica cínica?

Seguir leyendo La fragilidad de la apuesta cínica

Entrevista a Embat, organización libertaria de Catalunya

Las huellas que deja el movimiento anarquista conforman un mapa de caminos andados y también de aquéllos que están por trazarse. En esa labor presente y futura donde aún está todo por hacer, no queremos olvidarnos de un colectivo que cumplió este año su décimo aniversario: la organización libertaria Embat en Catalunya. Hace una década se abría un proceso amplio de construcción de una organización basada en el anarquismo social y en el concepto estratégico del poder popular. Queríamos hacerles una entrevista para conocer los pormenores de esta década de andadura y, sobre todo, conocer más de cerca el panorama del movimiento anarquista y sus coordinaciones en la actualidad.

Seguir leyendo Entrevista a Embat, organización libertaria de Catalunya