Archivo de la categoría: Opinión

¿Anarquismo o barbarie?

El desarrollo económico, técnico y del saber del mundo ha roto, en el mundo en el que vivimos, las morales y las ideologías dejando a los humanos en “pelota” doctrinal. En situaciones de crisis como esta, por comodidad y urgencia, se suele recurrir a doctrinas que están en la buhardilla de los modos de pensar envejecidos. Y por eso aparece hoy en día de nuevo, en los medios intelectuales, la solución nihilista. Que al negar los valores en general parece que explica lo acaecido, cuando en realidad únicamente ofrece un relativismo que llega, al negarse a analizar críticamente el mundo, a una parálisis progresiva de la acción que sobre el mundo podríamos ejercer. El nihilismo actual, heredero del de Nietzsche a través, entre otros, de Foucault, es una vía, la más fácil y casi natural (pues es un dejarse ir) de ocultar la estructura de la sociedad actual y así evitar el tener que proponer una vida nueva que contrarreste eficazmente, término este muy odiado por estos relativistas, los efectos nefastos de esta sociedad.

El nihilismo de hoy está convirtiendo a algunos anarcos en anarco-plañideras, que se limitan a denunciar el mal, ya que esta cuasi-doctrina considera el Poder como algo invencible ante el cual sólo queda el recurso del gemido. El miedo ante ese Poder, que ellos magnifican, les hace olvidar los intereses comunes y “resuelven” sus problemas en oraciones breves y fervorosas, en jaculatorias sollozantes. La anarquía puede quedar reducida a un simple “Muro de las lamentaciones” donde se dan cita, para llorar, los neo-nihilistas de ahora. Todo quedará en gritos y llantos.

El mal, en lugar de localizarlo en el mundo real que nos rodea, se cristaliza en conceptos a los que se concede un estatuto de realidad. Es que este fundir en uno el nombre y la cosa nombrada ha sido una característica del nihilismo desde siempre. Se llega así a un “intelectualismo” que gusta por lo fino que es, ya que con él podemos jugar “in mente” con los conceptos-problemas, sin necesidad de mancharse las manos ni sudar.

Dice Bookchin que su inquietud hoy, no reside en la ausencia de garantías de que aparecerá una sociedad libertaria sino en “si alguna vez de luchará por ella”, en un período tan desesperado y decadente.
 El sólo maldecir el mal que se nos hace, sin oponer una resistencia activa, conduce, querámoslo o no, a pedir un “salvador”, alguien que nos “dé la libertad”. Pero lo que los anarquistas querían era, precisamente, la supresión de las donaciones.

Hay que luchar por nosotros, no llorar por nosotros.

Antonio López Campillo
Prólogo al libro Historia, civilización y progreso, de Murray Bookchin

El anarquismo en la relaciones internacionales

Para explicar por qué un Estado (país o gobierno) hace aquello o lo otro, a nivel internacional, los analistas internacionales recurren a diversas teorías o paradigmas.

En relaciones internacionales, se suele afirmar que el sistema internacional es anárquico dado que no existe un gobierno mundial Seguir leyendo El anarquismo en la relaciones internacionales

Análisis post-electorales

Resulta que se están devanando los sesos, pensando qué decir. ¿A dónde fueron los votantes de Podemos? A la abstención parece ser. ¿Y por qué tomaron esa funesta decisión?
Lo primero, la maldición. Desde que nació Izquierda Unida tras la debacle del PCE de los ochenta, ha arrastrado un cenizo que te cagas. No importa cuán interesante haya sido su programa, nunca fue capaz Seguir leyendo Análisis post-electorales

Abstención política y política de la abstención

En épocas electorales siempre hay menciones, más bien pocas, en torno a la abstención. Pero tales discursos tienden en general a considerarla como un problema o una preocupación: si habrá mucha o poca, si afectará a uno u otro partido, si es más de izquierdas que de derechas. Y se repite, sobre todo durante la insípida jornada de reflexión, la llamada pública de las élites políticas a participar con el Seguir leyendo Abstención política y política de la abstención

¿Quién dijo socialdemocracia?

A las puertas de unas nuevas elecciones, donde todo, poco o nada cambiará para que todo siga igual, algunos políticos se llenan la boca de la palabra «socialdemocracia»; ¿sabemos verdaderamente qué significa el término de marras?, ¿tenemos una verdadera cultura política?, ¿alguien se lee, más allá de algún titular, los programas de las fuerzas políticas? (sí, ya sabemos que no los cumple ni el tato, pero ya que tantos insisten en participar en la farsa, que lo hagan a conciencia)

Seguir leyendo ¿Quién dijo socialdemocracia?

Farsa periódica

No votar, por supuesto. Pero las cosas han llegado a tal extremo, el Desarrollo se ha desarrollado tanto, que ese NO de «no votar» se ha quedado demasiado corto; que con la abstención no basta (y hasta puede tranquilizarle baratamente la conciencia, y que crea V. que con abstenerse ya está haciendo «algo positivo», o sea, en definitiva, votando a su manera), y que hace falta inventar maneras más eficaces Seguir leyendo Farsa periódica

Construir identidad

La sociedad actual presta cada vez mayor atención al cuerpo, en sentido físico y estético, a su imagen y a las diferentes representaciones de la corporeidad. La realidad mediática de la imagen, en la que estamos inmersos cotidianamente, es una auténtica pornografía de la foto. Las imágenes se reproducen constantemente en nuestros ordenadores y contribuyen a enfatizar este fenómeno, Seguir leyendo Construir identidad