Insistimos, una vez más y ante la realidad de toda colectividad humana, en la necesidad de negar toda verdad absoluta, caldo de cultivo para sectarismos y dogmatismos, que deberían ser ajenos a las ideas antiautoritarias; un pensamiento y unas prácticas, libres, que rechazen a nuevos dioses y amos, lo mismo que a cerradas doctrinas e ideologías.Sigue leyendo →
Sólo soy verdaderamente libre cuando todos los seres humanos que me rodean, hombres y mujeres, lo son igualmente. La libertad de otro, lejos de ser un límite o la negación de mi libertad, es su condición necesaria y su confirmación. Bakunin
La existencia de corrientes antiautoritarias ajenas al anarquismo (en tanto que ideología o en tanto que movimiento) no es un hecho nuevo. Desde las primeras resistencias al Estado, “como mentira y realidad”, la impugnación de la autoridad no ha cesado de engendrar formas diferentes de pensar y de vivir el antiautoritarismo, es decir: la libertad. Sigue leyendo →
El que la gente siga creyendo en cosas sin sentido es un poco para volverse loco. No hablo necesariamente de cuestiones místicas y/o abstrusas, sino de evidencias puestas delante de las narices, pero que en lugar de hacer tambalearse las creencias provocan que la gente se enroque aún más en ellas. Existe un proceso psicológico que puede ayudarnos a comprender esta peculiar actitud. La Sigue leyendo →
Hay quien ha definido la creencia como una especie de mapa, que llevaríamos grabado en nuestro interior (en mi opinión, y en nombre de la libertad, más producto del ambiente que de la genética), que nos conduce en el mundo para hallar una mejor satisfacción de nuestras necesidades. Así, dicho mapa no nos dice necesariamente cómo son las cosas, sino que nos muestra formas de conducta Sigue leyendo →
Christopher Hitchens: Dios no es bueno
(Random House Mondadori, Barcelona 2009). 332 páginas.
En octubre de 2011, falleció Christopher Hitchens, uno de los neoateos más conocidos. Valoré mucho la lectura de su Dios no es bueno y, especialmente, la impagable recopilación de textos que hace en el voluminoso libro Dios no existe. Poco tengo que objetar a las críticas que realiza al pensamiento religioso, Sigue leyendo →
Muy a menudo, y creo que la experiencia personal de los ateos combativos lo corrobora, incluso en gente del ámbito académico, se relaciona ateísmo con dogmatismo. De hecho, esto quizás a un nivel más coloquial, se quiere ver el ateísmo como una nueva religión. «Religión atea» o «ateísmo dogmático» es, ni más ni menos, un oxímoron. En cambio, «fundamentalismo religoso» parece más bien un pleonasmo.
Es habitual escuchar el argumento, por parte de personas religiosas (Ratzinger lo utilizó en diversas ocasiones y el nuevo pontífice, a pesar de su pelaje progre, estoy seguro que no tardará en hacerlo), relativo a que fue la ausencia de Dios la que dio lugar a los horrores provocados en el siglo XX por regímenes como el nazi o el estalinismo. No es que merezca mucha profundización dicha afirmación, ya que no solo es simplista, también sumamente distorsionadora, pero dado que hay que tantas personas que siguen vinculando moral a religión merece alguna atención. Esto es así porque la substitución de un dogma por otro, y es posible que algunas ideologías hayan encontrado un terreno fecundo en la mentalidad religiosa para desarrollarse, es el auténtico problema.
Un espacio en la red para el anarquismo (o, mejor dicho, para los anarquismos), con especial atención para el escepticismo, la crítica, el librepensamiento y la filosofía en general