Archivo de la categoría: Arte, ciencia y cultura

El imaginario social

Entendemos por imaginario social, término que se usa habitualmente en las ciencias sociales, un concepto creado para designar las representaciones sociales en sus instituciones. No pocas veces, puede considerarse a este concepto con el mismo significado de mentalidad, cosmovisión, conciencia colectiva o ideología. Para Cornelius Castoriadis, autor que se considera que ha dado un significado moderno al concepto que nos ocupa, las instituciones sociales y la posibilidad de transformación no se explican únicamente por causas materiales (tal y como sostienen los marxistas más deterministas), sino que tiene un papel importante el imaginario social.

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Para las religiones organizadas la duda es peligrosa

«Demoníaco» fue el sobrenombre que recibió Pedro Abelardo (1079-1142), un famoso filósofo francés del medioevo. Como docente, la práctica menos ortodoxa que Abelardo siguió, fue la de ser un crítico de los textos más encumbrados del momento. Abelardo dividía a su clase en dos bandos y pedía a uno de ellos defender una tesis y al otro rebatirla. En una época en que todo mundo asentía frente a los textos de los padres de la Iglesia, la Biblia y las enseñanzas de Aristóteles, contradecir al establecimiento no sólo era extraño sino peligroso. Seguir leyendo Para las religiones organizadas la duda es peligrosa

El grupo en torno a la publicación anarquista Freedom en el mundo británico

Recuperamos un artículo, que se publicó tal cual en la revista Erosión núm. 2, correspondiente al primer semestre de 2013; esta publicación es editada por los compañeros chilenos del Grupo de Estudios José Gomez Rojas, una más de las magníficas labores que llevan a cabo. Seguir leyendo El grupo en torno a la publicación anarquista Freedom en el mundo británico

Recordando a Darwin, revitalizando a Kropotkin

2009 es el año de celebración del segundo centenario del nacimiento de Charles Darwin. Se ha comentado ya mucho sobre aquel viaje, iniciado en 1831, por América del Sur e islas del Pacífico, que le permitió recoger un impresionante caudal de datos geológicos, botánicos y zoológicos. Pasarían varios años, con la consecuente ordenación y sistematización de esa información, para que elaborara su teoría de la evolución. Seguir leyendo Recordando a Darwin, revitalizando a Kropotkin