A propósito de ciertas tendencias, en la actualidad, de devastadora crítica al progreso, y a otros conceptos propios del proyecto de la modernidad como es el de «revolución», resulta importante y revitalizador revisar el pensamiento de autores libertarios al respecto.
No pocas veces se ha acusado al anarquismo de no captar en todo su complejidad la noción de poder. Para evitar confusiones, sería buena emplear el término de coerción, o de autoridad coercitiva (superando de paso la alegría con la que a veces utilizamos el de autoridad), aunque el tema es, obviamente, digno de estudio. Se ha hecho una distinción entre la autoridad, que tiene una connotación más tradicional o de fidelidad a unos valores, y el poder, que estaría más vinculado a la represión, la fuerza y la burocracia.
El anarquismo, aunque tenga una extensa prehistoria, nace en la primera mitad del siglo XIX; por lo tanto, al igual que el marxismo, es consecuencia de la Revolución francesa, del triunfo de la burguesía, de la formación de la clase obrera y del desarrollo del capitalismo industrial. Por muchos precedentes que podamos señalar, no podemos hablar de anarquismo explícito antes de Proudhon; dejaremos para más adelante, la primera y significativa controversia que tuvo este autor con Marx.
Uno de los pilares del anarquismo de Proudhon se asienta en el mutualismo, basado en sus experiencias directas con la clase trabajadora con el objetivo de adelantar un futuro de bienestar y justicia social; puede considerarse como la primera escuela económica anarquista, y así se reflejará en los seguidores de Proudhon en la Primera Internacional; según esta teoría, el Estado será sustituido por la organización de individuos según acuerdos voluntarios sobre una base de igualdad y reciprocidad.
Proudhon consideraba que el progreso de la sociedad llevaría a la superación del principio de autoridad, el cual delega a determinados dirigentes el derecho a la verdad. Su confianza en la ciencia social, entendida como acumulación y ordenamiento del material empírico encontrado, además de como cierta visión histórica, le hacía ver una incompatibilidad entre ella y ese principio de autoridad (según expone en Révolution sociale).
La palabra Federación, del latín foederare (unir por medio de una alianza), es un concepto organizativo donde diversas entidades se unen conservando su autonomía.
En el anarquismo la federación ha sido un tema fundamental desde los tiempos de Proudhon. Y lo es precisamente porque ese tipo de organización es lo que va más de acuerdo con los conceptos de Sigue leyendo →
Proudhon, en las páginas de su célebre ¿Qué es la propiedad?, publicada en 1840, ha sido el primero en definirse explícitamente “anarquista”, y el primero en conceder al concepto de “anarquía” una connotación positiva. De hecho, anteriormente, estos términos eran utilizados exclusivamente como conceptos negativos, identificando la ausencia de principio de gobierno y de jerarquía (del griego Sigue leyendo →
¿Qué quiso decir Proudhon con su conocida frase «La propiedad es el robo»? ¿Cómo contempla el anarquismo la cuestión de la propiedad? Incluso ateniéndonos a un anarquismo decimonónico, la respuesta no es ni debe ser dogmática.
El anarquismo nació como una corriente socialista que no consideraba dispensable la libertad, proponía la colectivización de los Sigue leyendo →
El 15 de enero de 2009 se cumplieron doscientos años del nacimiento de Proudhon. Considerado como el padre del anarquismo, dejó una abundante obra escrita, en la que destacan estudios como ¿Qué es la propiedad?, Sistema de contradicciones económicas, Manual del especulador de bolsa, De la justicia en la Revolución y en la Iglesia, El principio federativo, etc. Hemos querido ofrecer a nuestros lectores unos extractos de su última obra, La capacidad política de la clase obrera, por constituir de alguna manera su testamento político. Proudhon murió en 1865.
Aprovechando que se han cumplido 150 años de la muerte de Proudhon hemos querido ofrecer a nuestros lectores una antología de su pensamiento. Los textos están tomados de sus obras, tanto de las que se tradujeron al castellano como de las que están todavía inéditas en nuestra lengua. El título de cada obra va como epígrafe de los textos. Sigue leyendo →
Un espacio en la red para el anarquismo (o, mejor dicho, para los anarquismos), con especial atención para el escepticismo, la crítica, el librepensamiento y la filosofía en general